Nada en la vida es una coincidencia; cuando empecé trabajando en metal, pensé que sí lo era.
Ahora no, el metal es parte de mí, como mi piel; puedo sentirlo y reacciono ante él, es como si me hablara. Por eso me entusiasma trabajar con él.
Todos los procesos son una aventura: fundir, soldar, martillar, seguetear, conectar todo y, al final, el encuentro con una pieza que llega a la “vida”.
Cuando inicié, era solo por placer personal, pero después caí en cuenta que debía compartirlo.
Al principio fue difícil, era como entregar algo que era parte de mí, de mi corazón.
Por eso hoy hago joyería. Para las personas que realmente valoran y cuidan lo que he dejado ir de mí y aprecian ese pedazo de “vida” que he creado.
Este medio me ha regalado la libertad de escoger entre infinidad de procesos y materiales, al tiempo que me permite ser yo misma y dar el corazón en todo lo que hago.
galeria
esmeralda en bruto
plata .925 calada,
hecha a mano.
pieza única
plata .925 calado
hecha a mano
pieza única
collar/dije
plata .925 calado
hecha a mano.
pieza única
aros monarca
plata .925 calado
hecha a mano
pieza única